En la práctica uno se encuentra con dos tipos de imágenes religiosas, las hechas de yeso y las hechas de madera llamadas comúnmente policromías.
Las primeras se fabrican vaciando yeso a un molde antiguamente de yeso, actualmente de caucho, se lija y pinta con acrílico, y se le da una capa de un protector actualmente de acrílico, antiguamente de resina vegetal
Las segundas son bastante más difíciles de hacer, se talla la madera, se reviste con una argamasa de cola y yeso, se lija, se trata con goma laca, se pinta con óleo o pigmentos y se cubre con resina vegetal, es la labor de un imaginero